Ante la compra de un coche se segundamano realizamos un contrato con la persona que nos vende el vehículo, pero vamos a ver si en el valor del contrato de compraventa, es bueno poner el mínimo.
Hacienda tiene unas tablas del valor mínimo de transferencia de vehículos, muchas gestorías aconsejan poner en el contrato el mínimo legal, para ahorrar pagar mas impuestos.
El porcentaje varía según la comunidad autónoma, y es entre el 4% y el 8% del valor indicado en el contrato de compraventa.
Si el valor que figura en el contrato es inferior al de las tablas de hacienda, te pueden poner una multa y reclamar el resto del importe.
En nuestra página de inicio puedes ver el valor mínimo legal, en las calculadoras útiles situadas a la derecha.
Pongamos un ejemplo, si el valor de la compra del coche de segundamano es de 10.000€, y el valor mínimo de transferencia es de 8.000€, la diferencia si ponemos una media del 6% de tasas es de 120€.
Ahora bien, si el coche usado o de ocasión que te han vendido tiene algún defecto oculto que no has podido apreciar al probarlo, solo podrás reclamar por el importe que has puesto en el contrato de compraventa.
Si se trata de la compra de un coche clásico, el precio de mercado suele ser mucho mayor que el valor mínimo de transferencia, por lo que si como hemos indicado tiene algún problema oculto, es más importante aun es que figure el precio real.
Ya no es solo es importante por las averías que pueden surgir, si por ejemplo tiene un golpe y no tienes la culpa, si tienes un contrato con el valor real, dispondrás de un argumento importante para que te indemnicen por el lo que te ha costado.
En resumen, yo pondría siempre el valor real, porque tampoco te supondrá un gasto excesivo, y si te engañan o te estafan, o tienes un siniestro sin culpa, tendrás un documento con el precio real para poder reclamar.